Nuestra querida amiga Shola siempre fue un personaje: Ocurrente, graciosa, con frases y un estilo de hablar muy particular, aunque muy observadora, analítica y perspicaz.
Luego de nuestra salida de gavilanes y retorno a casa como palomas (ver “Qué esta tomando Lady in Blue”) me contó horrorizada que esa misma semana, por una de esas circunstancias de la vida, regresó a Cala el jueves por la noche.
Me parece envidiable!!! Mis horarios complicados y mi trabajo a las 8:45 de la madrugada hacen que sea impensable siquiera el considerar una trasnochada entre semana. Cómo extraño esas épocas hace varios años atrás donde un enamoradito que tenía (y decía que mi sentido de la propiedad era muy desarrollado) establecía como día de descanso solamente el lunes por la noche!!! Éramos pues solteros, algo (pensándolo bien, bastante) más jóvenes y definitivamente no padres.
En fin, siguiendo con la historia de Shola, me llamó la atención su auto-vergüenza de haber ido a Cala ese jueves por la noche y para colmo haberse cruzado no sólo con alguien que vió a lo lejos el sábado (hecho que no fue reportado oportunamente durante el trabajo de campo) sino además con el moreno guapo hermano de su amiga.
No entendía cuál era el problema! Cuántos como yo hubieran querido tener el tiempo o la fuerza para empezar el fin de semana desde el jueves más aún si eso implica “vigencia en el mercado”, lo que las madres, tías, abuelas y hasta amigas aconsejan: “Circula!!!! nadie va a ir a tocar la puerta de tu casa!”
Claro! No por eso me refiero ni estoy de acuerdo con el “tincuintro puinti” de Martina la empleada de hace siglos de mi casa, quien todos los sábados se lo decía a un “premo” para su salida del domingo. Creo que mantener vigencia es importante, pero aquí también me pongo bien “chocla” e insisto en que si es una cita, espero que el Príncipe Azul pase a recogerme en su blanco corcel.
Seguía cavilando y tratando de entender la profunda preocupación y auto flagelación a lo Santa Rosita de Lima de mi amiga Shola. Será alguna pose de niña conservadora de colegio de monjas? No aguanté más y tuve que preguntarle por qué tan profundo “embarazo” (como traducía mi amiga la China la palabra “embarrasment” cuando regresaba de visita a Lima).
La respuesta via chat de Shola fue contundente!
“me los vuelvo a encontrar el jueves”
“entonces “la buscona”.
“Ahgggggggg!!!!!”
“No soporto la ideaaaaaa!!!”
Tiene razón!!! En esta Lima querida, no sólo tenemos a otras leonas como terribles enemigos ocultos!!! (Ver: “Las Leonas Rugen”) Son los propios hombres! Los mismos que quieren libertad y relaciones abiertas con las mujeres, los que proponen los “tincuintru puinti” para que no sea una cita; pero que a su vez como en la canción “Larco” de Frágil, definirían así a las mujeres que “circulan” : “... y las que son víctimas vienen también, saben lo que tienen que exponer. Faldita a la moda, jean apretado, llegan de todos lados, pues es viernes sangriento.....”
Y una vez más, ocurrente, chiflada y con un estilo muy particular, Shola tenía razón. El machismo impera en esta ciudad a pesar que las mujeres somos cada vez más independientes. Tenemos que recordar pues que pertenecemos a la generación de Hola Yola y en su staff, existían los “Burbujitos”. Obviamente la “mentalidad de burbuja de Lima” no es exclusividad de las féminas y hago un mea culpa por olvidarlo durante 8 blogs! :o)
Luego de nuestra salida de gavilanes y retorno a casa como palomas (ver “Qué esta tomando Lady in Blue”) me contó horrorizada que esa misma semana, por una de esas circunstancias de la vida, regresó a Cala el jueves por la noche.
Me parece envidiable!!! Mis horarios complicados y mi trabajo a las 8:45 de la madrugada hacen que sea impensable siquiera el considerar una trasnochada entre semana. Cómo extraño esas épocas hace varios años atrás donde un enamoradito que tenía (y decía que mi sentido de la propiedad era muy desarrollado) establecía como día de descanso solamente el lunes por la noche!!! Éramos pues solteros, algo (pensándolo bien, bastante) más jóvenes y definitivamente no padres.
En fin, siguiendo con la historia de Shola, me llamó la atención su auto-vergüenza de haber ido a Cala ese jueves por la noche y para colmo haberse cruzado no sólo con alguien que vió a lo lejos el sábado (hecho que no fue reportado oportunamente durante el trabajo de campo) sino además con el moreno guapo hermano de su amiga.
No entendía cuál era el problema! Cuántos como yo hubieran querido tener el tiempo o la fuerza para empezar el fin de semana desde el jueves más aún si eso implica “vigencia en el mercado”, lo que las madres, tías, abuelas y hasta amigas aconsejan: “Circula!!!! nadie va a ir a tocar la puerta de tu casa!”
Claro! No por eso me refiero ni estoy de acuerdo con el “tincuintro puinti” de Martina la empleada de hace siglos de mi casa, quien todos los sábados se lo decía a un “premo” para su salida del domingo. Creo que mantener vigencia es importante, pero aquí también me pongo bien “chocla” e insisto en que si es una cita, espero que el Príncipe Azul pase a recogerme en su blanco corcel.
Seguía cavilando y tratando de entender la profunda preocupación y auto flagelación a lo Santa Rosita de Lima de mi amiga Shola. Será alguna pose de niña conservadora de colegio de monjas? No aguanté más y tuve que preguntarle por qué tan profundo “embarazo” (como traducía mi amiga la China la palabra “embarrasment” cuando regresaba de visita a Lima).
La respuesta via chat de Shola fue contundente!
“me los vuelvo a encontrar el jueves”
“entonces “la buscona”.
“Ahgggggggg!!!!!”
“No soporto la ideaaaaaa!!!”
Tiene razón!!! En esta Lima querida, no sólo tenemos a otras leonas como terribles enemigos ocultos!!! (Ver: “Las Leonas Rugen”) Son los propios hombres! Los mismos que quieren libertad y relaciones abiertas con las mujeres, los que proponen los “tincuintru puinti” para que no sea una cita; pero que a su vez como en la canción “Larco” de Frágil, definirían así a las mujeres que “circulan” : “... y las que son víctimas vienen también, saben lo que tienen que exponer. Faldita a la moda, jean apretado, llegan de todos lados, pues es viernes sangriento.....”
Y una vez más, ocurrente, chiflada y con un estilo muy particular, Shola tenía razón. El machismo impera en esta ciudad a pesar que las mujeres somos cada vez más independientes. Tenemos que recordar pues que pertenecemos a la generación de Hola Yola y en su staff, existían los “Burbujitos”. Obviamente la “mentalidad de burbuja de Lima” no es exclusividad de las féminas y hago un mea culpa por olvidarlo durante 8 blogs! :o)
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